En un momento de extremismos, da esperanza ver a dos adultos comportarse como tal en lo referente al MeToo.
Dan Harmon tuitea una generalidad sobre su papel en el movimiento y su ex-pupila en Community, Megan Ganz, le responde veladamente que sea más concreto. Por privado Ganz le indica que no hará acusaciones concretas contra él, pero que si lo que quiere es un perdón, debería ser honesto al respecto. Así que Harmon le pide que oiga el siguiente Harmontown (su podcast), en el que se marca una confesión impresionante y muy inteligente: huye absolutamente del morbo, de victimismos y de justificaciones. Simplemente describe los meses que precedieron a su despido temporal de Community, con Harmon en pleno divorcio, tomando pastillas y bebiéndose Rusia, persiguiendo a una Ganz primeriza a sus órdenes.
Tras oír el podcast, Ganz (que se quedó en la serie durante la ausencia de Harmon, pero se fue cuando regresó) ha aceptado públicamente la disculpa y la ha descrito como ejemplar.