Le estoy dando otra vuelta y no había caído en que la opción de la barra puede ser problemática cuando se usa proyector. Las barras no tienen tantas conexiones como un receptor porque están diseñadas para complementarse con el ARC/eARC de la tele, ya que en lugar de conectarlo todo a la barra es suficiente con conectarlo todo a la tele y que el sonido de la tele vaya a la barra por el ARC.
Con el proyector no se puede usar el ARC, así que usando una barra tendría que ir todo a la barra. Las barras con al menos 2 entradas HDMI son raras (y caras) y de hecho la Samsung Q930C que puse solo tiene una entrada HDMI y una óptica (además del ARC), por lo que se queda un poco corta. Para 2 entradas HDMI hay que tirar de la tope de gama, la Q990C, o algún otro modelo tope de gama de años anteriores de Samsung, LG, etc.
Dadas las circunstancias, la mejor opción creo que sigue siendo cambiar solo el receptor si es uno como el Denon X2200 que puse el otro día. Tiene suficiente potencia, calidad y conexiones para lo que haga falta, y tiene 2 salidas HDMI que pueden ir una a la tele (con ARC) y otra al proyector.
Sobre los altavoces, si el cableado es el original de los altavoces, haciendo obra yo aprovecharía para poner cables nuevos. Si con el cambio de receptor y cableado sigue petardeando alguno, yo haría un cambio quirurgico en lugar de cambiarlos todos, que eso si podría tener un coste asumible.
En un 5.1 hay 2 altavoces que tienen un uso muy específico (central y subwoofer) pero los traseros y la pareja frontal pueden ser intercambiables o incluso distintos. Es decir, si te falla uno podrías comprar solo una pareja y mantener los demás (central, subwoofer y 2 satélites). Si son mejores que los que tienes los pones de frontales, que son los que tienen más carga sonora, y si son malillos los pones detrás que ahí tampoco hace falta mucha finura. Y luego usando el sistema de calibración del receptor se puede cohesionar el sonido del conjunto aunque cada altavoz sea de su padre y de su madre.