Una saga que tuvo una notable primera entrega, una tercera interesante, unas cuantas secuelas apestosas y un crossover bastante simpático. Y ahora remake. ¿Habrá alguna película de los 80 que no se salve de ser "actualizada"? Cuando se anunció el remake de El club de los cinco, se confirmó que NO.
Con el guión corriendo a cargo de Wesley Strick (El cabo del miedo, Lobo, El santo, Aracnofobia, Doom), los cabecillas del proyecto y jefes del cotarro son Brad Fuller y Andrew Form, que a pesar de haber propuesto varios nombres para ocupar la silla de director (y algunos haberse dado casi por seguros, novatillos todos con pasado publicitario) siguen buscando un candidato con unas características muy concretas:
Y lo que estábamos esperando: ¿qué cambios sufrirá el legendario personaje de Freddy Krueger en este remake? El primer cambio gordo vendrá en cuanto al origen del personaje, que será radicalmente cambiado:
Recordemos el génesis de Fred en la saga iniciada por Wes Craven:
Por otro lado, Fuller y Form aseguran que mantendrá su imagen clásica, con la piel quemada, la camiseta a rayas, el sombrero y sobre todo el guante con cuchillas (¡quiero uno!). Menos intacta quedará la personalidad de Freddy, cuyas legiones de fans vienen sobre todo gracias a su negrísimo humor, sus chistes crueles y su sanguinario cinismo. Todo eso desaparecerá en el remake: Freddy perderá su carismática ironía y rollo de bastardo simpático, buscando una película más terrorífica.
Robert Englund anda bastante mosqueadillo con el proyecto (y con razón) al haberse confirmado que no contarán con él, y tras el fuerte rumor de que Billy Bob Thornton aspiraba al papel, el puesto vuelve a estar vacío. ¿Mi opinión? Si siguen ciegos y pasan de Englund, alguien como Robert Knepper daría el pego como un freddy del Siglo XXI... claro que la jugada maestra sería darle el papel a Johnny Depp, dos décadas después de ser asesinado por Fred Kruguer (¡devorado por una cama!).
A Nightmare on Elm Street se estrena en 2010... seguiremos atentos.

Con el guión corriendo a cargo de Wesley Strick (El cabo del miedo, Lobo, El santo, Aracnofobia, Doom), los cabecillas del proyecto y jefes del cotarro son Brad Fuller y Andrew Form, que a pesar de haber propuesto varios nombres para ocupar la silla de director (y algunos haberse dado casi por seguros, novatillos todos con pasado publicitario) siguen buscando un candidato con unas características muy concretas:
"We're looking for a visual director who can blow people away [...] Seamless transitions are the key, where the audience truly has no idea if it's a dream or not until it's too late you realize you've been duped for the last 30, 40, 90 seconds and the person's been dreaming the whole time."
Y lo que estábamos esperando: ¿qué cambios sufrirá el legendario personaje de Freddy Krueger en este remake? El primer cambio gordo vendrá en cuanto al origen del personaje, que será radicalmente cambiado:
"The concept of the original 'A Nightmare on Elm Street' wouldn't work. The concept of the movie is the kids discovering what happened, and the kids paying the price for their parent's sins. What we're struggling with is how we have his crimes in a way where the kids can't just type in 'Freddy Krueger' into Google and come up with his arrest record."
Recordemos el génesis de Fred en la saga iniciada por Wes Craven:
Frederick Charles Kruguer nació nueve meses después de que su madre, una enfermera que se quedó accidentalmente encerrada en el manicomnio en el que trabajaba, fuese violada cientos de veces por los locos. Tras un largo historial de abusos y palizas, Fred se dedicó a cargarse niños en el pueblecito de Springwood hasta que los padres de la localidad le quemaron vivo. Aceptando la oferta de eternidad de unos demonios que buscaban un alma sanguinaria, Freddy llevó a cabo su venganza de ultratumba contra los padres que le habían convertido en churrasco a través de sus hijos, entrando en sus sueños para cepillárselos desde allí.
Por otro lado, Fuller y Form aseguran que mantendrá su imagen clásica, con la piel quemada, la camiseta a rayas, el sombrero y sobre todo el guante con cuchillas (¡quiero uno!). Menos intacta quedará la personalidad de Freddy, cuyas legiones de fans vienen sobre todo gracias a su negrísimo humor, sus chistes crueles y su sanguinario cinismo. Todo eso desaparecerá en el remake: Freddy perderá su carismática ironía y rollo de bastardo simpático, buscando una película más terrorífica.
Robert Englund anda bastante mosqueadillo con el proyecto (y con razón) al haberse confirmado que no contarán con él, y tras el fuerte rumor de que Billy Bob Thornton aspiraba al papel, el puesto vuelve a estar vacío. ¿Mi opinión? Si siguen ciegos y pasan de Englund, alguien como Robert Knepper daría el pego como un freddy del Siglo XXI... claro que la jugada maestra sería darle el papel a Johnny Depp, dos décadas después de ser asesinado por Fred Kruguer (¡devorado por una cama!).
A Nightmare on Elm Street se estrena en 2010... seguiremos atentos.
Última edición: