Diego Torres está presionando a la Fiscalía para que se avenga a cerrar un acuerdo de conformidad que implicaría que tanto él como Iñaki Urdangarin se declaren culpables a cambio de la imposición de una pena inferior a dos años. Esta transacción evitaría, en la práctica, el ingreso en prisión del número uno y el 'número dos' del Instituto Nóos.
Diego Torres ha hecho saber tanto a Anticorrupción como a los otros letrados personados que en su poder obran "200 e-mails más comprometedores aún" que los que, a modo de aviso a navegantes, hizo públicos el pasado 16 de abril. En los conocidos hace dos semanas quedaba claro que el Rey y la Infanta hicieron gestiones a favor de Nóos.