Películas que vais viendo en casita
- Autor Magnolia
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Upperseven
Miembro habitual
LA VUELTA AL MUNDO EN OCHENTA DÍAS (Around The World In Eighty Days, 1956 -Michael Anderson)
La versión/adaptación más famosa de la celebre novela de Julio Verne, una superproducción de Michael Todd que intentó imponer un sistema de rodaje y proyección especialmente espectacular llamado Todd AO aprovechando el rodaje del film. El resultado es un film tan espectacular y tan plagado de colaboraciones , cameos y estrellas como claramente mediocre, ya que la estructura del film -además de tener una elipsis bastante bruscas- siempre está supeditado a la espectacularidad de un sistema que a la vez impedía hacer una puesta en escena que fuera elaborada. Con una inolvidable banda sonora de Victor Young y una película rodada por Michael Anderson en modo artesano a piñón fijo, es por lo tanto un ejemplo de película de gran espectáculo que acaba aburriendo al espectador más allá de la sorpresa de encontrarse un montón de conocidos o el buen hacer de los protagonistas David Niven y Cantinflas con una gran (y desaprovechada) química que desprenden entre ellos.
Mensch Maschine
Santur
Sid y Nancy (Alex Cox, 1986)
Interesante acercamiento al antirromance entre Sid Vicious y su novia Nancy y su trágico final, que curiosamente opta por un acercamiento entre el feismo estético que caracteriza el universo punk y la vida yonki en general, y un esteticismo de humo y neón propio de los 80, regado con abundante lirismo onirico-basurero (nunca mejor dicho). Muy loable en este sentido tanto el diseño de producción como la estupenda foto de Roger Deakins.
Un joven y esquelético Gary Oldman compone un Vicious quizá demasiado caricaturesco e histérico, pero aquí daba muestras tempranas del peculiar magnetismo freak que desarrollaría en su carrera posterior. En definitiva, no es un film perfecto, pero tiene la suficiente personalidad como para cautivar al espectador a pesar de su irregularidad, así como para mantener su frescura a los largo de las décadas que han pasado desde su estreno.
Un saludete.
Interesante acercamiento al antirromance entre Sid Vicious y su novia Nancy y su trágico final, que curiosamente opta por un acercamiento entre el feismo estético que caracteriza el universo punk y la vida yonki en general, y un esteticismo de humo y neón propio de los 80, regado con abundante lirismo onirico-basurero (nunca mejor dicho). Muy loable en este sentido tanto el diseño de producción como la estupenda foto de Roger Deakins.
Un joven y esquelético Gary Oldman compone un Vicious quizá demasiado caricaturesco e histérico, pero aquí daba muestras tempranas del peculiar magnetismo freak que desarrollaría en su carrera posterior. En definitiva, no es un film perfecto, pero tiene la suficiente personalidad como para cautivar al espectador a pesar de su irregularidad, así como para mantener su frescura a los largo de las décadas que han pasado desde su estreno.
Un saludete.
Upperseven
Miembro habitual
EMBRYO: LA CRIATURA MORTAL (Embryo, 1976 -Ralph Nelson)
Versión en clave fantástica de "Pigmalion" con Rock Hudson como científico que a partir de un accidente y utilizando un embrión humano logra dar vida a una criatura, en este caso una mujer, que tras crecer de manera muy acelerada logrará estabilizarse y tomará forma de la bellísima Bárbara Carrera. El film rodado por Nelson es un vehículo cuanto menos curioso al servicio de una historia que no se decanta claramente por el género de terror hasta su último tercio y que sin embargo interesa sobre todo por la relación de confianza y aprendizaje que tienen los dos protagonistas, en ese sentido es muy notable la interpretación de un Hudson excelente . De acabados y empaque muy clásico (Foto de Fred Koenekamp y música de Gil Melle son estupendas) , es un film que hubiera necesitado de un realizador con más gusto por el fantástico y no un tipo como Ralph Nelson acostumbrado a hacer películas con propuestas más sensacionalistas y acabados algo más toscos, aunque es cierto que en su filmografía hay algunas excepciones.
Upperseven
Miembro habitual
ASESINO SANGRIENTO (Scream Bloody Murder, 1973 -Marc Rand)
Curiosa película de serie B ,claramente precursora de los slashers de finales de los 70 principios de los 80 , con un niño de tendencias homicidas que tras matar a su padre y perder una mano (sustituida por un gancho) pasa unos años recluido en una institución mental que dejará al cumplir la mayoría de edad...Y liberado en su mayoría de edad, volverá a casa para empezar de nuevo con su espiral de asesinatos. Globalmente previsible y mediocre (a veces con un claro toque amateur) pero con buenos detalles visuales, en una producción que apunta buenas ideas aunque a veces está muy lastrada por una la ausencia de presupuesto y unos intérpretes que no siempre están a la altura -empezando por el propio protagonista- curiosamente me llama poderosamente la atención la poca utilización de elementos eróticos en el film y eso que el protagonista tiene una relación de amor-odio con una joven prostituta. Destacable también por un final que se cierra con una inesperada brillantez visual, no en vano la fotografía está firmada por un primerizo Stephen H. Burum
Upperseven
Miembro habitual
DOBLE PACTO (Double Deal, 1950 -Abby Berlin)
Simpatiquísimo noir de los de principios de los años cincuenta protagonizado por un actor -Richard Denning- que luego se convertiría en un popular intérprete de algunos clásicos del cine fantástico de aquella década. En esta ocasión estamos ante una pieza que centra el desarrollo de la acción en el mundo de las plantaciones petrolíferas, con el enfrentamiento entre dos hermanos y una serie de muertes que culpabilizan a un recién llegado interpretado por el antes citado. Película sencilla pero muy bien construida y dirigida por Abby Berlin, un autor que tuvo muy poco recorrido (y es una lástima) en el medio cinematográfico
Ropit
Miembro habitual
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He comprado esto que acaba de salir, región libre e incluso subtítulos en castellano pone. Pinta a gloria.
JONAS MEKAS : Diaries, Notes & Sketches Vol. 1-8 Blu-Ray boxset
Special collectors 8 Blu-ray boxset with 27 films by Jonas Mekas. Available in Blu-ray or DVD format.
re-voir.com
es una maravilla, una revelación, sus largometrajes en general no dejan de ser parte de una misma película hecha durante una vida.
Mensch Maschine
Santur
Cambio de sexo (Vicente Aranda, 1977)
Curioso y pionero acercamiento de frente y sin tapujos ni simbolismos hacia una temática (la transexualidad) que apenas 2 años antes habría sido impensable en una película española de una manera tan abierta. Sin ambargo, Vicente Aranda ofrece una puesta en escena irregular, o más bien mediocre, con diálogos que, de puro solemne, a veces resultan algo ridículos, sin que tampoco el esquema casi de novela rosa del guión ayude mucho. Sin embargo, el film se hace moderadamente entretenido gracias a una jovencísima y esforzada Victoria Abril, quien con 17/18 años ya aguantaba sin problemas el peso de una película, a pesar de su peculiar manera de ponerse intensa. También aparece por aquí otra jovencísima Bibí Andersen, aunque su voz real no se escucha en ningún momento, probablemente para no causar excesivo rechazo en el espectador de la época.
Y para redondear la lista de alicientes del film, está la fotografía de Néstor Almendros en su único film español, aunque en las fichas que hay de la peli aparece acreditado Jose Luís Alcaine como co-autor. Lo cierto es que, al menos en el montaje final, parece haber casi más trabajo de Alcaine que de Almendros, sin que en general la luz de ambos para el film en ningún momento se encuentre ni remotamente entre lo más logrado de sus respectivas carreras.
En definitiva, una curiosidad de su época y país, que sigue resultando simpática y meritoria, más por su propia condición de hito temático y documento histórico de los inicios de la Transición que por su calidad como película.
Un saludete.
Curioso y pionero acercamiento de frente y sin tapujos ni simbolismos hacia una temática (la transexualidad) que apenas 2 años antes habría sido impensable en una película española de una manera tan abierta. Sin ambargo, Vicente Aranda ofrece una puesta en escena irregular, o más bien mediocre, con diálogos que, de puro solemne, a veces resultan algo ridículos, sin que tampoco el esquema casi de novela rosa del guión ayude mucho. Sin embargo, el film se hace moderadamente entretenido gracias a una jovencísima y esforzada Victoria Abril, quien con 17/18 años ya aguantaba sin problemas el peso de una película, a pesar de su peculiar manera de ponerse intensa. También aparece por aquí otra jovencísima Bibí Andersen, aunque su voz real no se escucha en ningún momento, probablemente para no causar excesivo rechazo en el espectador de la época.
Y para redondear la lista de alicientes del film, está la fotografía de Néstor Almendros en su único film español, aunque en las fichas que hay de la peli aparece acreditado Jose Luís Alcaine como co-autor. Lo cierto es que, al menos en el montaje final, parece haber casi más trabajo de Alcaine que de Almendros, sin que en general la luz de ambos para el film en ningún momento se encuentre ni remotamente entre lo más logrado de sus respectivas carreras.
En definitiva, una curiosidad de su época y país, que sigue resultando simpática y meritoria, más por su propia condición de hito temático y documento histórico de los inicios de la Transición que por su calidad como película.
Un saludete.
Upperseven
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LA PATRULLA DEL PELIGRO (Danger Patrol, 1937 -Lew Landers)
Toda una curiosidad del cine de género de los años treinta, dirigida por una artesano de larga y solvente filmografía y que aquí avanza en argumento la posterior y magistral "El Salario Del Miedo " (1951) de H. G. Clouzot, narrando en esta ocasión un drama romántico que involucra a personas que transportan nitroglicerina para ganarse la vida...Y es en este sentido donde el film de Landers, al no focalizar tanto en la tensión y el suspense (aunque lo tiene) queda como un preludio de una idea que quince años mas tarde sería desarrollada en todo su esplendor fílmico...Con todo , una rareza que merece verse
Emergency (2022)
Pelicula de amazon studios que en el trailer aparentaba ser una especie de comedia pero no, es una abominacion donde todo es racismo.
Unos universitarios encuentran a una chica blanca inconsciente al llegar a casa. Y ya sabeis como va esto, no llames a emergencias que somos unos negros y en cuanto vengan y vean a la chica en el suelo nos disparan. Con lo que deciden intentar llevarla al hospital, mientras la hermana de la muchacha se pone a buscarla con lo que todos acaban llevandose por los prejuicios. Basicamente los negros piensan que los blancos son racistas, los blancos son, evidentemente, racistas, los negros son racistas, etc... Y en el culmen de la sutileza, se deshumaniza a la policia, no les veras la cara a ninguno de ellos.
No se si con el film querian revindicar el racismo existente o perpetuarlo. De esta supuesta comedia probablemente solo una escena me parecio que tuviera algo de gracia. Por lo demas, pues que todo es racismo y esas cosas ideologicas tan presentes actualmente.
Pelicula de amazon studios que en el trailer aparentaba ser una especie de comedia pero no, es una abominacion donde todo es racismo.
Unos universitarios encuentran a una chica blanca inconsciente al llegar a casa. Y ya sabeis como va esto, no llames a emergencias que somos unos negros y en cuanto vengan y vean a la chica en el suelo nos disparan. Con lo que deciden intentar llevarla al hospital, mientras la hermana de la muchacha se pone a buscarla con lo que todos acaban llevandose por los prejuicios. Basicamente los negros piensan que los blancos son racistas, los blancos son, evidentemente, racistas, los negros son racistas, etc... Y en el culmen de la sutileza, se deshumaniza a la policia, no les veras la cara a ninguno de ellos.
No se si con el film querian revindicar el racismo existente o perpetuarlo. De esta supuesta comedia probablemente solo una escena me parecio que tuviera algo de gracia. Por lo demas, pues que todo es racismo y esas cosas ideologicas tan presentes actualmente.
Upperseven
Miembro habitual
CUENTA HASTA TRES Y REZA (Count Three And Pray, 1955 -George Sherman)
Western tan curioso como menor en la filmografía de George Sherman, rodado con la solvencia habitual y que a pesar de un muy buen planteamiento va disolviendo su interés por culpa de un guion que nunca sabe decantarse realmente en el tono que quiere ofrecer. Aun a sí acomete una trama interesante: Acabada la guerra civil americana un rebelde de pasado violento (Van Heflin) vuelve al Sur y se encuentra con una población hostil, hostilidad que aumenta cuando el aparece como un reconvertido nuevo pastor de la iglesia.. Enfrentándose al recelo de los habitantes y las dificultades que le plantea el villano local (un Raymond Burr en su salsa)
Upperseven
Miembro habitual
IMAGINE THAT (2009 -Karey Kirkpatrick)
Película típica del Eddie Murphy de la década de los años 2000 , donde ha ido modificando tono y objetivos de su humor, en este caso proponiendo una comedia familiar en la que incorpora a un ejecutivo empresarial que descubre que su hija le puede dar buenos consejos para afrontar los desafíos de su trabajo. Película tan correcta como prescindible , se deja ver por el evidente oficio que tiene Murphy en sabe sacar provecho de las escenas cómicas
Harkness_666
Son cuatro
Cyclo, de Tran Anh Hung
Son dos historias, narradas paralelamente, en la populosa ciudad de Saigón; la de un conductor de ciclo-taxi apenas salido de la adolescencia que se ve enredado en una deuda con la mafia local al serle robado el vehículo, el medio de locomoción más habitual del país, y la de uno de los cabecillas de esta, un atormentado proxeneta enamorado de la hermana del chico.
El cine asiático irrumpió en los 90 con propuestas tan radicales como esta, una inmersión en el infierno que es también una búsqueda desesperada de la redención, cual trayectorias que confluyen. Con un pie en lo documental, captura la realidad social mísera en extremo de un país tercermundista, a la vez que se aleja del mero realismo y roza lo abstracto mediante un estilo visual elaborado, con composiciones de plano inusuales, una cámara con autonomía que indaga, se mueve y escruta cada rincón con sus travellings laterales. Caótica, excesiva película que se recrea sin rubor en lo sórdido y truculento, en una violencia considerable, en ocasiones confusa y sin sentido (la inacabable y agónica muerte de un putero, un rostro cubierto de parásitos y mierda de letrina, alguna que otra parafilia que tensa la línea entre lo bonito y lo horrible… precioso todo). Asistimos a un panorama de gentes humildes que se ganan la vida a duras penas, aunque dignamente; también de delincuencia, marginalidad, trabajo infantil por completo normalizado. Muchos ambientes insalubres, de calor pegajoso, humedad y mugre, edificios que se caen a trozos…
Es un film poco o nada complaciente que puede llegar a ser muy cargante, que te zarandea. Que tan pronto te acaricia tiernamente, con una felicidad ingenua que transmite por instantes, momentos musicales mediante… como asquea y escupe a la cara sin piedad. Repleto de elipsis que uno sigue a duras penas, la parquedad del diálogo y del guion lleva a que el espectador se haga la trama en su cabeza según avanza, sin explicaciones, tan sólo a partir de la pura gestualidad. Para muestra de esto último, un maltrecho Tony Leung haciendo de sí mismo. Es decir, espíritu torturado, errante y solitario que se pasa media peli atrapado en una subtrama que no avanza, prácticamente sin frases, fumando con gesto inescrutable y haciendo lo que mejor sabe… sufrir mucho, por fuera y presumimos que por dentro, y es increíble lo lejos que se lleva esta inacción; yo también quiero estar jodido en una discoteca mientras me baila una furcia con Creep de Radiohead de fondo. Pero es que la performance física del otro actor no se queda muy atrás, más extrema incluso, aproximándose en un momento dado a lo que sería una acción de arte contemporáneo.
Cuento moral con inevitable regusto neorrealista, con bicicletas y limpiabotas, aunque sólo en la base, remueve y revela sin necesidad de un discurso político explícito la suciedad atroz en que habitan unos personajes indefensos, que se asfixian vivos en la trágica telaraña del destino. Como repetidos a sí mismos en el tiempo, sujetos a la explotación arbitraria del más fuerte, al dinero omnipresente que circula muy bressonianamente de mano en mano, víctimas de la dejación de funciones del estado… pero también son posibles los milagros, el amor desinteresado y contrario al utilitarismo. El final cobra un aire irreal y de ensueño, se prolonga agónico como parte de un desarrollo nunca del todo convencional. Todo esto con un soundtrack epatante, a cuentagotas y haciendo uso de barrocas metáforas: el pez, el retrasado mental, fallos eléctricos y goteras. Presencia de agua y de fuego, chancletas de pobre y zapatos de rico. Luces, colores ocres, pintura, entremezclados con vaguedades poético-filosóficas orientales. Un helicóptero averiado, unas niñas en un cole o un resort de lujo, vivo contraste el de una nación de pobres, putas y maleantes.
Son dos historias, narradas paralelamente, en la populosa ciudad de Saigón; la de un conductor de ciclo-taxi apenas salido de la adolescencia que se ve enredado en una deuda con la mafia local al serle robado el vehículo, el medio de locomoción más habitual del país, y la de uno de los cabecillas de esta, un atormentado proxeneta enamorado de la hermana del chico.
El cine asiático irrumpió en los 90 con propuestas tan radicales como esta, una inmersión en el infierno que es también una búsqueda desesperada de la redención, cual trayectorias que confluyen. Con un pie en lo documental, captura la realidad social mísera en extremo de un país tercermundista, a la vez que se aleja del mero realismo y roza lo abstracto mediante un estilo visual elaborado, con composiciones de plano inusuales, una cámara con autonomía que indaga, se mueve y escruta cada rincón con sus travellings laterales. Caótica, excesiva película que se recrea sin rubor en lo sórdido y truculento, en una violencia considerable, en ocasiones confusa y sin sentido (la inacabable y agónica muerte de un putero, un rostro cubierto de parásitos y mierda de letrina, alguna que otra parafilia que tensa la línea entre lo bonito y lo horrible… precioso todo). Asistimos a un panorama de gentes humildes que se ganan la vida a duras penas, aunque dignamente; también de delincuencia, marginalidad, trabajo infantil por completo normalizado. Muchos ambientes insalubres, de calor pegajoso, humedad y mugre, edificios que se caen a trozos…
Es un film poco o nada complaciente que puede llegar a ser muy cargante, que te zarandea. Que tan pronto te acaricia tiernamente, con una felicidad ingenua que transmite por instantes, momentos musicales mediante… como asquea y escupe a la cara sin piedad. Repleto de elipsis que uno sigue a duras penas, la parquedad del diálogo y del guion lleva a que el espectador se haga la trama en su cabeza según avanza, sin explicaciones, tan sólo a partir de la pura gestualidad. Para muestra de esto último, un maltrecho Tony Leung haciendo de sí mismo. Es decir, espíritu torturado, errante y solitario que se pasa media peli atrapado en una subtrama que no avanza, prácticamente sin frases, fumando con gesto inescrutable y haciendo lo que mejor sabe… sufrir mucho, por fuera y presumimos que por dentro, y es increíble lo lejos que se lleva esta inacción; yo también quiero estar jodido en una discoteca mientras me baila una furcia con Creep de Radiohead de fondo. Pero es que la performance física del otro actor no se queda muy atrás, más extrema incluso, aproximándose en un momento dado a lo que sería una acción de arte contemporáneo.
Cuento moral con inevitable regusto neorrealista, con bicicletas y limpiabotas, aunque sólo en la base, remueve y revela sin necesidad de un discurso político explícito la suciedad atroz en que habitan unos personajes indefensos, que se asfixian vivos en la trágica telaraña del destino. Como repetidos a sí mismos en el tiempo, sujetos a la explotación arbitraria del más fuerte, al dinero omnipresente que circula muy bressonianamente de mano en mano, víctimas de la dejación de funciones del estado… pero también son posibles los milagros, el amor desinteresado y contrario al utilitarismo. El final cobra un aire irreal y de ensueño, se prolonga agónico como parte de un desarrollo nunca del todo convencional. Todo esto con un soundtrack epatante, a cuentagotas y haciendo uso de barrocas metáforas: el pez, el retrasado mental, fallos eléctricos y goteras. Presencia de agua y de fuego, chancletas de pobre y zapatos de rico. Luces, colores ocres, pintura, entremezclados con vaguedades poético-filosóficas orientales. Un helicóptero averiado, unas niñas en un cole o un resort de lujo, vivo contraste el de una nación de pobres, putas y maleantes.
Upperseven
Miembro habitual
MONSTRUO ADOLESCENTE (Teenage Monster, 1958 -Jacques Marquette)
Mediocre ejemplar de film de terror cincuentón, que en esta ocasión narra la historia de una mujer que tiene escondido a su hijo adolescente en un granero, afectado por una extraña radiación que de pequeño lo convirtió en una especie de hombre lobo. El film mediocre y bastante ridículo, casi siempre acaba siendo el típico ejemplar de película que no sabe para nada aprovechar las posibilidades de la historia.Siendo una de las versiones más rutinarias que recuerdo de este tipo de películas que abordan la licantropía , rodada además sin ningún interés y alargando en exceso la trama para conseguir llegar al minutaje mínimo para poder estrenarse
MISTERIO EN EL BARCO PERDIDO (The Wreck Of Mary Deare, 1959 -Michael Anderson)
Thriller rodado al servicicio de dos estrellas (Gary Cooper y Charlton Heston) y que en su época fue un proyecto que estuvo a punto de ser dirigido por Alfred Hitchcock. No es de extraña que finalmente abandonase la idea ya que el guión no acaba de estar bien pulido, siuendo una historia muy bien planteda en su primera mitad como resuleta de modo harto convencional en la segunda
ROBOT AND FRANK (2012 -Jake Schreier)
Discretísimo drama ambientado en un futuro cercano, donde los robots ayudan a las personas en sus tareas quotidianas. Aquí centrada la trama en un hombre mayor (genial Frank Langella, lo mejor sin duda de la función con problemas de memoria que recibe el regalo de un androide con el que tratará de recuperar habilidades
THE WICHFINDER GENERAL (1968 -Michael Reeves)
Revisionado de esta excelente película, uno de los films emblemáticos de la moda "cazadores de brujas y torturadores" aparecida a finales de los sesenta y principios de los setenta (entre ellos: "Las Torturas de la Inquisición" o "Los Demonios"). Titulada El inquisidor o El general witchfinder en España, supuso el último film del talentoso (y malogrado) Michael Reeves, que demuestra aquí saber rodar con ritmo y elegancia....A pesar de la crudeza y la violencia de algunas secuencias. Basada en una novela de Ronald Basset y con un Vincent Price como rey de la función encarnado uno de sus agradecidos villanos (un personaje real que se dedicaba a cazar brujas y cometer tropelías en Inglaterra) .Muy ajustada en presupuesto, pero eficaz en cuanto explica una historia simple con bastante brio y tambien algo de efectismo. Formalmente correcta y con una maravillosa partitura musical de Paul Ferris, puede crear decepciones si el espectador espera un film "de terror" cuando estamos más cerca del film denuncia-escándalo, o el drama histórico
Me estoy viendo la de misterio en el barco perdido...pues ni tan mal. Esta curiosa a ver qué tal la cierra pero los primeros cuarenta minutos ni una queja...
Mensch Maschine
Santur
El último boy scout (Tony Scott, 1991)
Apoteosis del cine macarra, con todos sus participantes sacandose la chorra a ver quién es el más chulo. Tony coge un guión de mierda de Shane Black, por el que se pagó una millonada en su día, y lo ilustra con toda su típica parafernalia visual más pasada de vueltas e histérica que nunca (hasta ese momento, claro), mientras tito Willis (aún con pelo) va perdonando la vida a todo el que se cruza en su camino, para luego cargárselo claro. Todo queda en un desarrollo delirante, con dialogos francamente divertidos en su estupidez, en el que Scott demuestra que era capaz de entregar el envoltorio que se esperaba de él, mientras en el fondo se descojona de los USA, sus instituciones políticas y culturales, y hasta de él mismo.
Hace años vapuleaba este film; ahora, con Tony desaparecido hace una década y tito Willis retirado por su triste enfermedad, no me queda más remedio que rendirme ante la nostalgia hacia otras épocas y maneras de ver las cosas, disfrutando del film como un gorrino y gozando de la entrañable desfachatez de sus perpetradores.
Un saludete.
Apoteosis del cine macarra, con todos sus participantes sacandose la chorra a ver quién es el más chulo. Tony coge un guión de mierda de Shane Black, por el que se pagó una millonada en su día, y lo ilustra con toda su típica parafernalia visual más pasada de vueltas e histérica que nunca (hasta ese momento, claro), mientras tito Willis (aún con pelo) va perdonando la vida a todo el que se cruza en su camino, para luego cargárselo claro. Todo queda en un desarrollo delirante, con dialogos francamente divertidos en su estupidez, en el que Scott demuestra que era capaz de entregar el envoltorio que se esperaba de él, mientras en el fondo se descojona de los USA, sus instituciones políticas y culturales, y hasta de él mismo.
Hace años vapuleaba este film; ahora, con Tony desaparecido hace una década y tito Willis retirado por su triste enfermedad, no me queda más remedio que rendirme ante la nostalgia hacia otras épocas y maneras de ver las cosas, disfrutando del film como un gorrino y gozando de la entrañable desfachatez de sus perpetradores.
Un saludete.
Harkness_666
Son cuatro
Cuando las brujas arden (Witchfinder general), de Michael Reeves
Durante el clima de caos político y religioso de la Inglaterra del siglo XVII, en plena guerra civil entre los “realistas” del rey Carlos I y los “parlamentarios” de Cromwell, un indeseable sujeto llamado Matthew Hopkins (Vincent Price) recorre las aldeas ofreciendo sus servicios como supuesto cazador de brujas. Bajo una apariencia de legalismo, se dedica a acusar de brujería mediante farsas judiciales para obtener beneficio económico, prestigio, y ya de paso, satisfacer sus más bajos instintos con el género femenino, todo a costa de agitar la crispación y la superstición de las clases populares.
Impresionante la presencia y la voz de Price interpretando a este personaje real, componiendo un villano cínico, hipócrita, cobarde, aunque astuto como el que más cuando le conviene y de maneras calmadas y refinadas, que dice encarnar la justicia y la autoridad de Dios y se acompaña de sádicos matones que le hacen el trabajo sucio, como su desagradable secuaz; en el fondo, son rufianes y pícaros sin escrúpulos de los que, por desgracia, siempre ha habido y habrá, que medran gracias a un contexto de vacío de poder y que son tal vez la consecuencia de la ausencia de humanidad que les rodea, más que la causa directa. El resto de actores están muy justos y para cubrir el expediente, en lo que no deja de ser un primitivo exploit truculento y sensacionalista que parte de cierto horror gótico que en realidad se recrea en el morbo de las torturas y del fanatismo religioso, o más bien, el uso interesado de la religión para legitimar la violencia.
Película de una cutreza considerable en su atrezzo, vestuario y ambientación, con las esperables dosis de pintura Titanlux fingiendo ser sangre; artificio total y puesta en escena abundante en zooms, aunque con intermitentes encuadres de buena composición que otorgan un papel destacado al paisaje y con una fotografía en tecnicolor que supone un punto a favor. Como propuesta psicotrónica que es, su base no es tanto terrorífica como de western; está el bueno, que es muy noble y honrado, los malosos, la chica ultrajada y su padre, idas y venidas a caballo de un pueblo a otro, ley del más fuerte ante la ausencia de ley formal, disparos y escaramuzas… pero es que incluso los temas musicales parecen dignos de peli del oeste.
Por si fuera poco, esto es un “rape and revenge” que carga las tintas del ensañamiento y replica precisamente esos malos instintos, generando una venganza malsana que trastoca la moral del héroe, convertido en una bestia furiosa que busca ejecutar su propia justicia; inquietante final, con ese grito sin fin de la víctima como conclusión última. Aparece por cierto Cromwell, a quien se nos presenta como un tipo estupendo, sin que aporte demasiado a la trama, y me quedo con un detalle puntual de montaje; la transición desde las olas de la costa de Norfolk a las llamas de la hoguera donde se está quemando a la supuesta hechicera y adoradora de ese demonio que, como era de esperar, siempre ha sido en todas las guerras, en todas las luchas por una idea, espantosamente humano.
Durante el clima de caos político y religioso de la Inglaterra del siglo XVII, en plena guerra civil entre los “realistas” del rey Carlos I y los “parlamentarios” de Cromwell, un indeseable sujeto llamado Matthew Hopkins (Vincent Price) recorre las aldeas ofreciendo sus servicios como supuesto cazador de brujas. Bajo una apariencia de legalismo, se dedica a acusar de brujería mediante farsas judiciales para obtener beneficio económico, prestigio, y ya de paso, satisfacer sus más bajos instintos con el género femenino, todo a costa de agitar la crispación y la superstición de las clases populares.
Impresionante la presencia y la voz de Price interpretando a este personaje real, componiendo un villano cínico, hipócrita, cobarde, aunque astuto como el que más cuando le conviene y de maneras calmadas y refinadas, que dice encarnar la justicia y la autoridad de Dios y se acompaña de sádicos matones que le hacen el trabajo sucio, como su desagradable secuaz; en el fondo, son rufianes y pícaros sin escrúpulos de los que, por desgracia, siempre ha habido y habrá, que medran gracias a un contexto de vacío de poder y que son tal vez la consecuencia de la ausencia de humanidad que les rodea, más que la causa directa. El resto de actores están muy justos y para cubrir el expediente, en lo que no deja de ser un primitivo exploit truculento y sensacionalista que parte de cierto horror gótico que en realidad se recrea en el morbo de las torturas y del fanatismo religioso, o más bien, el uso interesado de la religión para legitimar la violencia.
Película de una cutreza considerable en su atrezzo, vestuario y ambientación, con las esperables dosis de pintura Titanlux fingiendo ser sangre; artificio total y puesta en escena abundante en zooms, aunque con intermitentes encuadres de buena composición que otorgan un papel destacado al paisaje y con una fotografía en tecnicolor que supone un punto a favor. Como propuesta psicotrónica que es, su base no es tanto terrorífica como de western; está el bueno, que es muy noble y honrado, los malosos, la chica ultrajada y su padre, idas y venidas a caballo de un pueblo a otro, ley del más fuerte ante la ausencia de ley formal, disparos y escaramuzas… pero es que incluso los temas musicales parecen dignos de peli del oeste.
Por si fuera poco, esto es un “rape and revenge” que carga las tintas del ensañamiento y replica precisamente esos malos instintos, generando una venganza malsana que trastoca la moral del héroe, convertido en una bestia furiosa que busca ejecutar su propia justicia; inquietante final, con ese grito sin fin de la víctima como conclusión última. Aparece por cierto Cromwell, a quien se nos presenta como un tipo estupendo, sin que aporte demasiado a la trama, y me quedo con un detalle puntual de montaje; la transición desde las olas de la costa de Norfolk a las llamas de la hoguera donde se está quemando a la supuesta hechicera y adoradora de ese demonio que, como era de esperar, siempre ha sido en todas las guerras, en todas las luchas por una idea, espantosamente humano.
Upperseven
Miembro habitual
HEMBRA (Female, 1933 -Michael Curtiz)
Curiosa película , casi reivindicación feminista , en la que una mujer empresaria ambiciosa joven y que de alguna manera ha olvidado el amor tiene un conflicto personal cuando de entre las muchas relaciones superfluas con los hombres que tiene, acaba encontrando a uno que es un poco la horma de su zapato. Todo rodado con bastante gracia y ritmo por un Michael Curtiz que ya en los años 30 demostraba ser un director muy hábil.
Elliott
Desconozco
Mensch Maschine
Santur
Ni he dicho lo contrario ni veo la contradicción 
...
Un saludete.
...Un saludete.
Raven
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Obra maestra. Tiene mucha chicha debajo de sus apariencias de explotación. Reeves, tras la promesa de Los Brujos y esta joya iba para grande, pero murió trágicamente a los 25 años.
Elliott
Desconozco
Ni he dicho lo contrario ni veo la contradicción
Un saludete.
con esos dialogos para mi no es un guion "de mierda", pero bueno
Harkness_666
Son cuatro
Le pornographe, de Bertrand Bonello
Un director de cine pornográfico (Jean-Pierre Leáud) vuelve a la profesión tras décadas de retiro, pero pronto se dará cuenta de que nada es lo que fue, de que se encuentra fuera de lugar. Decepcionará esto a quienes busquen una inmersión en los entresijos del porno, pues se trata de un estudio de personaje cascado, melancólico y a la deriva tras el que se perciben los ecos lejanos del mayo francés. Continuamente interrumpido y frustrado en cada uno de los caminos argumentales que traza, es un film exasperante que no va a ningún lado, conforme supongo a aquello que intenta retratar, que es la pérdida de rumbo vital. Siguiendo cierto despojamiento bressoniano, con actores inexpresivos y sin pretensión alguna de empatía, con un uso de la música más preocupado por reforzar las imágenes antes que por darles carga emotiva. Que ofrece mucho tedio, pero también alguna escena poderosa y tristemente elocuente, como una en la que el productor empieza a dirigir la película guarra ante la total pasividad del director, sin que este pueda o quiera hacer nada.
Más honesta en su carnalidad la cerdería original, cercana a lo artístico y a la praxis revolucionaria y espontánea de la época, que la actual; formulaica, encorsetada, sujeta al presupuesto y al calendario. Y ahí tenemos a nuestro hombre, intentando retomar el rumbo de su existencia aun a costa de tomar decisiones y asumir verdades dolorosas; si lo logrará o no, no lo sabemos, ni siquiera si tiene sentido dicho intento de construir una casita él sólo, o de finalizar un largometraje inconcluso, porque así es él y así somos en el fondo todos; puro proyecto frustrado o en proceso.
Curiosamente la peli, antes de deshacerse en retazos de reconstrucción biográfica e incluso meta-cine, mantiene hacia este Jacques una actitud de respeto; más aún, de pudor. Porque como nos dice, más obscena es la exhibición directa y melodramática de su realidad que el trabajo de sus películas; no es causal la década ochentera como punto y final, por cambio de mentalidad, de los medios, o por hundimiento definitivo de esos sueños. La cosa se inclina hacia el absurdo cuando nuestro hombre se cuela dentro de la casa de una señora cualquiera, así sin más. Una única y breve secuencia de sexo real produce desconcierto, aunque debido a la temática tampoco es tan gratuita, y por lo visto valió a esto el más que dudoso honor de ser clasificado dentro de la dosmilera etiqueta de la “New French Extremity”… cosa que da que pensar, pues por lo demás, el video de mi primera comunión quizá sea más “extremo”; desde luego, no tan francés.
Frente al prota, su hijo, y con él, las luchas y los activismos de la juventud burguesa de principios del milenio; un peculiar intento de hacer la revolución mediante el silencio… la comunicación, en forma de diario o de notas, o la propia elocuencia muda de lo que vemos, como si todo estuviera dicho ya, tiene algo que ver. Se consideran una modernez el teléfono móvil y los videoclips, cosa que vista hoy parece hasta inocente. La subtrama de este nene, con una emulación ¿paródica? De ese estilo de video musical, quizá esté hablando de que todo contacto humano va dirigido a lo artificial; como tanto él como su novia derrochan la pasión de dos gambas crudas, pues tampoco está muy claro.
Un director de cine pornográfico (Jean-Pierre Leáud) vuelve a la profesión tras décadas de retiro, pero pronto se dará cuenta de que nada es lo que fue, de que se encuentra fuera de lugar. Decepcionará esto a quienes busquen una inmersión en los entresijos del porno, pues se trata de un estudio de personaje cascado, melancólico y a la deriva tras el que se perciben los ecos lejanos del mayo francés. Continuamente interrumpido y frustrado en cada uno de los caminos argumentales que traza, es un film exasperante que no va a ningún lado, conforme supongo a aquello que intenta retratar, que es la pérdida de rumbo vital. Siguiendo cierto despojamiento bressoniano, con actores inexpresivos y sin pretensión alguna de empatía, con un uso de la música más preocupado por reforzar las imágenes antes que por darles carga emotiva. Que ofrece mucho tedio, pero también alguna escena poderosa y tristemente elocuente, como una en la que el productor empieza a dirigir la película guarra ante la total pasividad del director, sin que este pueda o quiera hacer nada.
Más honesta en su carnalidad la cerdería original, cercana a lo artístico y a la praxis revolucionaria y espontánea de la época, que la actual; formulaica, encorsetada, sujeta al presupuesto y al calendario. Y ahí tenemos a nuestro hombre, intentando retomar el rumbo de su existencia aun a costa de tomar decisiones y asumir verdades dolorosas; si lo logrará o no, no lo sabemos, ni siquiera si tiene sentido dicho intento de construir una casita él sólo, o de finalizar un largometraje inconcluso, porque así es él y así somos en el fondo todos; puro proyecto frustrado o en proceso.
Curiosamente la peli, antes de deshacerse en retazos de reconstrucción biográfica e incluso meta-cine, mantiene hacia este Jacques una actitud de respeto; más aún, de pudor. Porque como nos dice, más obscena es la exhibición directa y melodramática de su realidad que el trabajo de sus películas; no es causal la década ochentera como punto y final, por cambio de mentalidad, de los medios, o por hundimiento definitivo de esos sueños. La cosa se inclina hacia el absurdo cuando nuestro hombre se cuela dentro de la casa de una señora cualquiera, así sin más. Una única y breve secuencia de sexo real produce desconcierto, aunque debido a la temática tampoco es tan gratuita, y por lo visto valió a esto el más que dudoso honor de ser clasificado dentro de la dosmilera etiqueta de la “New French Extremity”… cosa que da que pensar, pues por lo demás, el video de mi primera comunión quizá sea más “extremo”; desde luego, no tan francés.
Frente al prota, su hijo, y con él, las luchas y los activismos de la juventud burguesa de principios del milenio; un peculiar intento de hacer la revolución mediante el silencio… la comunicación, en forma de diario o de notas, o la propia elocuencia muda de lo que vemos, como si todo estuviera dicho ya, tiene algo que ver. Se consideran una modernez el teléfono móvil y los videoclips, cosa que vista hoy parece hasta inocente. La subtrama de este nene, con una emulación ¿paródica? De ese estilo de video musical, quizá esté hablando de que todo contacto humano va dirigido a lo artificial; como tanto él como su novia derrochan la pasión de dos gambas crudas, pues tampoco está muy claro.
Upperseven
Miembro habitual
RÍO ABAJO (River Lady, 1948 -George Sherman)
Muy buen western del casi siempre notable George Sherman, director que en este género fue marcando una serie de títulos que quedan entre lo notable y lo excelente.En esta ocasión una trama situada en el río Mississippi y el conflicto de los madereros. La película tiene todas las virtudes del mejor cine de este muy reivindicable director norteamericano , sentido del ritmo, escenas de gran contenido dramático y la capacidad innata que tenía de sacar partido a cualquier secuencia por tópica que resultase en origen.