Sorel
Miembro habitual
- Mensajes
- 15.651
- Reacciones
- 2.215
Follow along with the video below to see how to install our site as a web app on your home screen.
Se debe tener en cuenta: This feature may not be available in some browsers.
Flash Gordon es una de las películas más maravillosamente delirantes de los setenta.
Respeto tu valor...
Es una pelicula para echarse unas risas, si con amigos, mejor.
Ahora atrevete com Tomyknockers...![]()
Bueno, pues yo he visto:
"Carnival Of Souls". ¡Vaya, vaya! Me esperaba una película bastante buena, pero lo que no me esperaba es que tuviera un buen par de sustos, de los que no te esperas. No quiero destripar nada, pero he disfrutado mucho con todas los detalles y todas las cositas que va dejando la película para que uno se elabore su propia teoría respecto a lo que ocurre. Uno de los aspectos que más me han gustado, ha sido precisamente el que en algunos blogs que he leído se critica, el amateurismo de los actores (quitando a la actriz protagonista). Precisamente eso da un especial clima de extrañeza respecto a lo que puede ser, y no puede ser.
"The Vampire Lovers". Qué película más maravillosamente erótica. La escena de "que si estoy guapa con esto" es una cumbre del terror con tintes eróticos made in hammer, y de todo el fantaterror europeo sesentero y setentero. Ingrid Pitt maravillosa, atmósfera evocadora (ojo a esa entrada de la vampira en el pueblo), y una trama ágil que va saltando de casa en casa (o de castillo en castillo). Lo único que no me ha gustado es el señor Karnstein en su caballo poniendo caras maléficas.
No se como demonios logró William Friedkin caer en un pozo tan hondo después de esta y French connection.
Y que diferencias hay entre esos dos montajes?
No se como demonios logró William Friedkin caer en un pozo tan hondo después de esta y French connection.
Básicamente porque su siguiente peli (Carga maldita) costó una pasta, varios años y un rodaje lleno de disgustos con el estudio y los actores, rematado con un hostión en taquilla y una opinión general bastante fría. Tampoco ayudó que con A la caza se le echase media América al cuello. A partir de ahí, a los encargos, a los telefilmes y al cielo de los directores setenteros que viven de rentas...