En mi caso hubo un bicho (no era un boss) que pensé que no podría pasármelo nunca pero se ocurrió algo que pensaba que no funcionaría, pero funcionó y me llenó de orgullo y satisfacción.
En el fuerte que hay en Koboh hay un sapo en un foso al que caes en un suelo trampa y que es una locura.
El caso es que antes de caer estaba el suelo lleno de robots así que intenté que cayeran conmigo y lucharan a mi lado hackeándolos, pero no había manera.
Pero resulta que un nivel más arriba hay un par de bigardos que llevan un mazo. Conseguí arrastrar a uno de ellos hacia el nivel del suelo trampa con la fuerza, nos caímos al foso y les dejé que se pegasen mientras yo le buscaba la espalda al sapo. Mano de santo