No se resta mérito a su consecución, a la proeza de poner al límite el cuerpo humano, etc, la circunscribimos en un entorno mediatizado que ensalza lo visualmente impactante, la víscera rápida, la inmediatez y lo que mañana será olvidado.
Si no de qué las audiencias del fútbol, de gandias shores o mujeres hombres y viceversa ocupan más espacio televisivo que Punset.
Vende lo que impacta en lo más primario del ser humano. Vende la inmediatez de lo banal, vende la lágrima fácil de los telfilms de medio día de antonia 3 y no el cine de La 2, etc etc etc.
Es una proeza, como lo sería hacer los 100 m lisos en 8 segundos...pero sigue siendo banal aunque a todos nos fascine y enganche, porque es algo innato al ser humano...y los medios son muy listos en eso.
También es cierto que todos necesitamos ser partícipes un poco de esas banalidades...como la adrenalina, como un buen polvo, como una mariscada...pero con los pies en el suelo.
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