Vacas (Julio Medem, 1991)
Notable debut en el largometraje de Medem, que narra la rivalidad entre 2 familias euskaldunas a lo largo de varias décadas de finales del siglo XIX y principios del XX. Si bien el guión tiene tintes folletinescos, y el presupuesto fue obviamente escaso, Medem se las arregla para narrar la historia con cierta ambición épica, usando sus habituales juegos de imagen, sonido y montaje, que aquí se encuentran razonblemente bien realizados pese a tratarse de un film de debut, y con una puesta en escena tan atmosférica y sugerente como era habitual en la obra del realizador vasco en sus primeros 10 años de carrera en el largo. Años en los cuales demostró que se podían hacer películas en España con una clara vocación estética y sensorial sin dejar de lado la pura narración y el sentido del ritmo, y por ello, resultar accesibles para el público medio. Aquí por ejemplo podemos encontrarnos referencias que van desde Buñuel hasta David Lean, no siempre logradas, pero siempre muy refrescantes por cómo Medem las integra en la narración. Qué gran cineasta de cine épico podría haber sido Medem de haber nacido en un país con industria para ello, y de haber tenido él la voluntad de tirar hacia ese lado, claro.
Por otro lado, tenemos el estupendo reparto encabezado por la pareja por excelencia del cine español de los 90 (Carmelo Gómez y Emma Suárez) y algunos secundarios, entonces poco conocidos, pero que acabarían siendo omnipresentes en nuestro cine en décadas venideras. Y por supuesto, la BSO de un Alberto Iglesias que empezaba a despuntar, y que encontraría en Medem a su colaborador perfecto e inseparable, al menos en aquellos años.
En definitiva, un film que prometía una carrera interesante y así fue al menos durante unos años, hasta que inexplicablemente Medem empezó a encadenar proyectos erróneos e insulsos en el mejor de los casos, seguramente cargados de buenas intenciones, pero carentes de la magia y la sensualidad entre descarada y elegante que impregnó su obra entre 1991 y 2001.
Un saludete.