Edgtho
Miembro habitual
Impresionante, navegando en un foro de aviación he encontrado la que para mi ha sido la explicación definitiva a este sistema de reparto de votos el cual nunca habia terminado de entender. Espero que a los demas les sirva tanto como me ha servido a mi.
http://blog.pseudolog.com/article/la-ley-d-hont
Y es que el problema segun refleja el articulista, y con el que estoy de acuerdo, no es la ley D'Hont sino el chapucero sistema de circunscripciones en el que se basa nuestra Democracia y en el hecho de que el Senado no sirve para absolutamente nada.
http://blog.pseudolog.com/article/la-ley-d-hont
El resto en el enlace de arriba...Vistos los problemas que presenta el Método de los Restos Mayores se buscó una alternativa lo más sencilla posible. El resultado fue la Ley D’Hont.
Bueno, en realidad alternativas y variantes hay muchas, pero una de las cualidades que tiene que tener todo sistema de reparto en democracia es que no sólo debe ser justo sino también parecerlo y hay una tendencia generalizada a escoger sistemas sencillos y fáciles de entender aunque no sean tan precisos y efectivos como alguna de sus variantes más complicadas.
Lo que acabo de decir puede resultar paradógico para todo aquel que lea la prensa estos días y encuentre una descripción de la Ley D’Hont: Esotéricas tablas donde se hacen divisiones sin saber muy bien porqué, elegir las casillas más grandes, partidos mayoritarios consiguiendo escaños a mejor precio que los minoritarios, diferencias enormes de escaños entre partidos que tienen el mismo número de votantes…
Menudo lio, ¿no?
La Ley D’Hont = La Ley de la Oferta y la Demanda.
¡Sorpresa! La Ley D’Hont es, ni más ni menos, que el resultado de aplicar la Ley de la Oferta y la Demanda al reparto de escaños. Punto.
Así, la idea básica es que cada escaño tendrá un precio y que se usará la Ley de la Oferta y la Demanda para fijar dicho precio. Dicha ley dice que existe un precio justo para el cual se venderán, exactamente, todos los escaños sin que sobre ni falte ninguno (solucionando así el problema de los escaños sobrantes que teníamos con la Regla de Tres)
El hecho de que todos los escaños se vendan al mismo precio debería asegurar la proporcionalidad: cuantos más votos tienes, más escaños podrás “comprar”.
Veamos un ejemplo para entenderlo mejor. El ejemplo trata de repartir 12 escaños entre 4 partidos políticos (A, B, C y D) que han obtenido 4.000.000 votos, 3.500.000 votos, 2.000.000 votos y 1.500.000 votos respectivamente...
Y es que el problema segun refleja el articulista, y con el que estoy de acuerdo, no es la ley D'Hont sino el chapucero sistema de circunscripciones en el que se basa nuestra Democracia y en el hecho de que el Senado no sirve para absolutamente nada.
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