Respuesta: GLEE. El instituto según Ryan Murphy.
Es lo que dice Ulisses. Es una serie de instituto, y como tal siempre tiene que tener sus líos de amoríos, popularidad y tal, pero si la comparas con cualquier serie de la CW la diferencia es abismal. Ya aunque solo sea por tener protas que aun siendo resultones parecen personas de carne y hueso y no salidas de un casting de supermodelo. Y la serie tiene bastante mala baba, ya no solo por la mala leche de los personajes de Sue y Terri, sino porque la serie ridiculiza a la inmensa mayoria de sus personajes: Rachel es mostrada como una loca, Finn como un palurdo, Santana como un zorrón, Puck y Brittany como cabezas huecas, Mercedes como una diva, Kurt como el mayor sarasa de la historia de la homosexualidad, el profesor Tanaka como un guarro, Emma como una obsesiva compulsiva... vamos, que esta serie no deja títere con cabeza, el único personaje con el que no se queman demasiado es con el profesor Schue. Y los argumentos muchas veces son tan surrealistas que parecen sacados más de un tebeo de 'Dr. Slump' que de una serie de instituto convencional.
También es cierto que tampoco llega al nivel de precedentes como la sensacional 'Freaks & Geeks', para un servidor la serie definitiva sobre la adolescencia, pero en fin, que son dos series con estilos muy diferentes. Yo a 'Glee' la veo más cercana en tono a 'Election', aunque quitándole el rollo político.
No cabe duda que la clave del éxito de esta serie se debe a que ha sabido convencer tanto a la gran masa a la que solo le interesan las historias de amoríos y las canciones de los 40 como a los que les gustan el humor absurdo, los diálogos punzantes, los personajes bizarros y las situaciones surrealistas.