Un gesto cotidiano en estos días de fútbol ha sembrado la polémica en Sotogrande. Vecinos de la lujosa urbanización sanroqueña mostraron ayer a este periódico su malestar e indignación por la retirada de una bandera de España que lucía en una garita de vigilancia por la protesta de una residente de origen gibraltareño.
La entidad urbanística de conservación Parques de Sotogrande confirmó por la mañana que se retiró la insignia que había colocado un vigilante jurado en su caseta con motivo de la Eurocopa, pero alegaron que no estaba en un lugar adecuado y negaron que hubiera queja alguna. Sin embargo, ya por la tarde se produjo la vuelta de la enseña nacional a la garita -como pudo comprobar este periódico- con el fin de mitigar las reiteradas quejas de los propietarios, al trascender el hecho.
Todo comenzó a finales de la pasada semana, cuando un vigilante de seguridad decidió a título particular colgar una bandera española sin escudo bajo la ventana frontal de una garita ubicada en la avenida Paniagua. La enseña permaneció en el lugar hasta aproximadamente las 20 horas de la tarde del lunes, cuando tuvo que retirarla por orden de la entidad de conservación debido a las quejas por parte de una vecina de la urbanización natural de Gibraltar; un hecho que ha indignado a los residentes españoles que incluso han llevado entre el miércoles y la mañana de ayer varias banderas como gesto de apoyo hasta el punto de control.