Mensch Maschine
Santur
La Bamba (Luis Valdéz, 1987)
Prototípico biopic ochentero, de los que van de la A a la B sin apenas detenerse en escenas superfluas o que den pie a momento alguno de lirismo/reflexión. El homenajeado aquí es el malogrado Ritchie Valens, la prometedora estrella latina del rock que vio truncada su vida y carrera con tan solo 17 años por el tristemente famoso accidente de aviación que también arrebató la vida a Buddy Holly y The Big Bopper. Lou Diamond Phillips (quien por cierto no es latino, sino medio filipino) da vida al joven cantante con acierto y frescura, aunque también es cierto que su personaje es bastante plano. En cambio, el personaje más complejo y goloso recae en Esai Morales interpretando a su hermano Bob, quien cobra un protagonismo en la cinta que hace dudar a veces de sobre de quién trata realmente el film.
Como ya digo, se trata de un film correcto, pero en el que quizá se echa de menos algo más de ambición, por mucho que trate de un individuo de efímera existencia. Eso no quita para que la película tenga su encanto, en su retrato (algo superficial y tópico) de la vida de los latinos en los EEUU de los 50, del mundo rockabilly primigenio, y de la capacidad que esta música tuvo para unir a personas de las principales etnias estadounidenses más que cualquier otro elemento de la historia de aquel país hasta ese momento.
Un saludete.
Prototípico biopic ochentero, de los que van de la A a la B sin apenas detenerse en escenas superfluas o que den pie a momento alguno de lirismo/reflexión. El homenajeado aquí es el malogrado Ritchie Valens, la prometedora estrella latina del rock que vio truncada su vida y carrera con tan solo 17 años por el tristemente famoso accidente de aviación que también arrebató la vida a Buddy Holly y The Big Bopper. Lou Diamond Phillips (quien por cierto no es latino, sino medio filipino) da vida al joven cantante con acierto y frescura, aunque también es cierto que su personaje es bastante plano. En cambio, el personaje más complejo y goloso recae en Esai Morales interpretando a su hermano Bob, quien cobra un protagonismo en la cinta que hace dudar a veces de sobre de quién trata realmente el film.
Como ya digo, se trata de un film correcto, pero en el que quizá se echa de menos algo más de ambición, por mucho que trate de un individuo de efímera existencia. Eso no quita para que la película tenga su encanto, en su retrato (algo superficial y tópico) de la vida de los latinos en los EEUU de los 50, del mundo rockabilly primigenio, y de la capacidad que esta música tuvo para unir a personas de las principales etnias estadounidenses más que cualquier otro elemento de la historia de aquel país hasta ese momento.
Un saludete.