Respuesta: Películas que vais viendo en casita
- Oslo, August 31st (2011), de Joachim Trier
Uff, qué mal. Hace años vi Reprise, primera película de este pariente lejano del danés, y me gustó mucho. Cuando el año pasado se presentó su segundo trabajo ya temía que aquella se me cayese en revisión, pero no me esperaba esto. Sin saber nada del argumento, me encuentro con un remake de El fuego fatuo absolutamente raquítico, con un trabajo de guión a todas luces insuficiente e incapaz de dar algo de entidad al protagonista, ahora un tipo más joven enganchado a varias sustancias.
El problema es que resulta ser un completo gilipollas, una cosa boba de la que solo esperas que se suicide cuanto antes. Ni rastro de la angustia con causa de aquel hombre que se tragó la vida, de aquellas amistades rotas, de aquella desolación. Aquí todo son diálogos y secuencias inertes que no conducen a ninguna parte, y las disertaciones se convierten en pedantería insoportable. Y sobre esto me queda la duda de si no apreciaremos mejor lo que está dicho en francés y blanco y negro por puro esnobismo rancio, pero cinematográficamente esta segunda película de uno de mis directores a seguir (hasta ahora) es nula.
- Oslo, August 31st (2011), de Joachim Trier
Uff, qué mal. Hace años vi Reprise, primera película de este pariente lejano del danés, y me gustó mucho. Cuando el año pasado se presentó su segundo trabajo ya temía que aquella se me cayese en revisión, pero no me esperaba esto. Sin saber nada del argumento, me encuentro con un remake de El fuego fatuo absolutamente raquítico, con un trabajo de guión a todas luces insuficiente e incapaz de dar algo de entidad al protagonista, ahora un tipo más joven enganchado a varias sustancias.
El problema es que resulta ser un completo gilipollas, una cosa boba de la que solo esperas que se suicide cuanto antes. Ni rastro de la angustia con causa de aquel hombre que se tragó la vida, de aquellas amistades rotas, de aquella desolación. Aquí todo son diálogos y secuencias inertes que no conducen a ninguna parte, y las disertaciones se convierten en pedantería insoportable. Y sobre esto me queda la duda de si no apreciaremos mejor lo que está dicho en francés y blanco y negro por puro esnobismo rancio, pero cinematográficamente esta segunda película de uno de mis directores a seguir (hasta ahora) es nula.