Bueno... en fin... que ninguna de mis intervenciones ha sido para picar a nadie. Ni siquiera cuando he puesto en duda la validez de atreveros a enseñar cómo ha de usarse una pistola, para así matar mejor y más rápido. Sólo he dicho lo que pienso, no pensáis igual... pues aquí paz y después gloria. No obstante, perdón por poner en duda vuestro criterio a la hora de decirlo y perdón por pegar una torta a mi hijo por escaparse
Volviendo al tema. Doy al cien por cien la razón a Superfugazy, por mucho que queráis haceros una idea real de lo que significa ser padre, jamás lo entenderéis hasta que no lo seáis. Yo me negué muchísimos años a ser madre, hasta que lo fuí.
Por supuesto que fué meditado, pero el alcance real de lo que hablamos no se entiende en su plenitud, hasta que no se vive.
Lo siento a quién le moleste, pero (para mí) es así. Por supuesto que escucho opiniones contrarias y las respeto, y por supuesto que se debe debatir (si se quiere) aunque no se sea padre.
Un hijo no es ninguna mascota, ni aumenta el ego de nada, ni se tienen para liberar frustraciones, ni porque ya toque. Simplemente se tienen a ciegas, con la presunción errónea de que ha sido meditado y decidido con conocimiento de causa. Pero es que... eso nos pasa a todos. El primer hijo es así, siempre. Después te das cuenta de la pasta que vale, de lo sacrificado que es, de la agonía que te supone no saber hacerlo bien y de lo perdido que en realidad estabas.
Y no por esto, se es inconsciente. Todos los padres hemos pasado por lo mismo. Cuando realmente eres inconsciente es cuando vas a por el segundo, sabiendo lo que te viene en encima...
Algo he leído por atrás de que se tienen hijos para arreglar las maltrechas relaciones de una pareja, (o que esto sucede en algunos casos). Nada más lejos de la realidad, por el contrario es otra fuente nueva de choque y de crispación por las decisiones conjuntas que se han de tomar y sobretodo, por el cansancio que sopone criar a un bebé, los nervios de los primerizos, la falta de seguridad sobre si lo estaremos haciendo bien (que todos sufrimos) y el cambio de vida tan radical que supone.
Y otra cosa más, Seaker... las que estamos embarazadas y las que abortamos, somos nosotras. La opinión de los hombres es totalmente respetable y digna de tener en consideración, pero los cambios físicos y hormonales los sufrimos nosotras. Y en mi experiencia como madre, te aseguro que los hijos son de las madres. Y ninguna afirmación machista es más real que ésta. Porque somos las que llevamos adelante el embarazo, las que parimos, las que nos ocupamos en último término de su alimentación, las que dejamos de ir a trabajar (de forma mayoritaria) si el niño está malo... etc,etc,etc.
No quiero abrir ningún frente nuevo de lucha. Digo lo que pienso. Y creo que Seaker me conoce lo suficiente como para saberlo.
